Claudio Germán Caballero, era docente de la Escuela de Aguas Verdes, desapareció el 12 de noviembre de 2012 y fue intensamente buscado por sus familiares y la policía.
Luego de casi 3 meses, la policía encontró los restos, más precisamente el 30 de enero del 2013 en la zona de Nueva Atlantis. Junto al cuerpo encontraron su licencia de conducir y una mochila que contenía tóxicos para ratas y una botella. Silvana, hermana del docente fallecido, deslizó en aquel tiempo que podría haber entrado en una crisis, por su estado depresivo.
Tras esta serie de eventos, la justicia ordenó que se realizaran pruebas de ADN. Las primeras, dieron resultados negativos, lo cual pareció cambiar el rumbo del caso.
Desde la Dirección de DD.HH. de La Costa, a cargo de Martín Poustis en diálogo con RadioNoticiasWeb, se sugirió la «necesidad de otro test». Además, expertos en la materia y la propia familia coincidían en el concepto. El análisis de los restos óseos, entregaron resultado positivo, no hubo mas dudas, era el cuerpo de Claudio Caballero.
La segunda parte de esta triste historia, tiene que ver con la lucha de los familiares por conseguir el certificado de defunción de Claudio, bajo su nombre, ya que al día de la fecha, más de un año después, Caballero, sigue figurando en los registros, como NN (latín: Nomen nescio, Nombre desconocido).
¿Cuánto tiempo mas deberá esperar la familia Caballero para poder realizar su duelo?