Ya son varios los casos de similares características que han ocurrido en medio del aislamiento social, preventivo y obligatorio como medida de seguridad ante el brote del coronavirus, estos hechos en los que se rompe con la norma se repiten día a día.
En esta oportunidad, se realizó una fiesta clandestina en la casa de una mujer policía de Dolores, la situación en horas de la madrugada se desbordó cuando tres masculinos agredieron a un vecino que se quejó de la música.
El hombre se encontraba en su casa, con su pequeño hijo, que tuvo que presenciar como golpeaban brutalmente a su padre, a tal punto que el hombre hasta sufrió la pérdida de piezas dentales.
Todo sucedió en una vivienda ubicada en la calle Mendiola entre Wallace y Vilgré Lamadrid. Según informó Diario COL los residentes de las propiedades cercanas llamaron en varias oportunidades a la policía que si bien se hizo presente en el lugar, no habría detenido a ninguna persona.
