En el Día Mundial de la Hipertensión Arterial, hoy viernes 17 de mayo, la Municipalidad de La Costa, a través de su dirección de Promoción de la Salud, brinda a la comunidad una serie de consejos y recomendaciones para el cuidado de la salud de las personas que sufren esta enfermedad.
¿Qué es la hipertensión arterial?
La hipertensión arterial es una enfermedad frecuente que padece un tercio de la población adulta. Es producida por el aumento de la fuerza de presión que ejerce la sangre sobre las arterias de forma sostenida.
Se trata de una enfermedad asintomática durante mucho tiempo, que en caso de no tratarse puede decantar en complicaciones severas como infarto de corazón, accidente cerebrovascular, daño renal y ocular.
¿Cómo se detecta?
La única manera de detectarla es midiendo la presión arterial. Existen dos medidas: la presión arterial sistólica (PAS) o máxima y la presión arterial diastólica (PAD) o mínima. Se considera hipertensión cuando la medición máxima es mayor a 140 y la mínima es de 90.
¿Cómo se previene y trata?
Si bien en la mayoría de los casos, la hipertensión arterial no tiene cura, se puede mantener controlada. Para el tratamiento, la medicación es sólo una parte de lo indicado por los especialistas, porque suelen acompañarlo por alimentación saludable, actividad física y el cuidado en el consumo de sal y alcohol.
Los consejos médicos apuntan a mantener los siguientes hábitos: reducir el peso corporal, reducir el consumo de sal (4-6 gramos de sal), reducir la ingesta de alcohol, realizar actividad física (entre 30 y 45 minutos tres veces a la semana), reducir el consumo de café, consumir alimentos ricos en potasio, no fumar y seguir una dieta rica en ácidos grasos poliinsaturados y pobre en grasas saturadas.
Es importante que el paciente hipertenso acuda al servicio de emergencias en caso de cualquiera de los siguientes síntomas: dolor de cabeza muy intenso y repentino, mareos o vértigo, visión borrosa, dolor en el pecho o sensación de falta de aire, dificultad para hablar y levantar un brazo o parálisis facial.